EP79 Organización emocional

Organización emocional. Podcast En casa con María
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EP79 Organización emocional
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Hoy quería hablarte de una idea que me parece importantísima: la organización emocional. Es un concepto que va más allá del simple orden físico en el hogar o en el lugar de trabajo. Se trata de detectar el desorden interno y de tratar de encontrar el equilibrio emocional y reflejarlo en nuestro entorno externo.

¿Por qué nos desorganizamos emocionalmente? Seguramente hay un número elevado de razones que pueden incidir en que nos desordenemos emocionalmente. Pero te voy a dejar las 4 en las que más coinciden los expertos como punto de partida:

1 Experiencias pasadas no resueltas: Las experiencias traumáticas o difíciles del pasado pueden dejar una huella emocional que afecta nuestra capacidad para lidiar con las emociones en el presente. Los eventos dolorosos no procesados pueden provocar patrones de pensamiento negativos, miedo al enfrentamiento de situaciones similares y dificultad para regular nuestras emociones. La falta de resolución emocional puede llevar a una acumulación de estrés y ansiedad, contribuyendo así a la desorganización emocional en nuestra vida cotidiana.

2 Estrés crónico y sobrecarga de responsabilidades: El estrés crónico y la sobrecarga de responsabilidades pueden abrumarnos, haciéndonos sentir desbordados y desorganizados emocionalmente. Vivir en un estado constante de tensión y preocupación puede agotar nuestros recursos emocionales, dejándonos con poco margen para manejar nuestras emociones de manera efectiva. Como resultado, podemos sentirnos desorganizados emocionalmente, luchando por encontrar un equilibrio entre nuestras responsabilidades y nuestras necesidades emocionales.

3 Expectativas poco realistas: Las expectativas poco realistas sobre nosotros mismos y sobre los demás pueden generar frustración, decepción y estrés emocional. Cuando nos exigimos demasiado o esperamos demasiado de los demás, podemos sentirnos constantemente insatisfechos y desorganizados emocionalmente. La presión para cumplir con estándares irreales puede llevar a sentimientos de incompetencia, ansiedad y autoexigencia, contribuyendo así al desorden emocional en nuestras vidas.

4 Falta de autocuidado y atención plena: La falta de autocuidado y atención plena puede dejarnos vulnerables al desorden emocional. Cuando descuidamos nuestras necesidades físicas, emocionales y mentales, corremos el riesgo de agotamiento, burnout y desconexión con nosotros mismos. La falta de atención plena puede dificultar la gestión efectiva de nuestras emociones, ya que no estamos presentes para reconocer, aceptar y procesar nuestras experiencias internas. ¿Te reconoces en alguno de ellos? Pues ya tienes un punto de partida.

¿Te gustaría aprender a no desorganizarte emocionalmente? También de eso vamos a hablar. Te dejo herramientas para hacerlo y para Integrar la organización emocional en tu entorno, en tus espaciosporque el orden externo es un reflejo del orden interno.

Una vez que hayas trabajado en tu equilibrio emocional, refleja ese orden interno en tu entorno externo. Pon tu espacio en ordeny mantenlo libre de desorden para fomentar la calma y la claridad mental.

Para eso, no me cansaré de decirlo, hace falta desprenderte de cosas, no vivir en espacios donde haya acumulación de ropa, de adornos, de libros y cuadernos, de recuerdos emocionales. Quédate solo con los más significativos y suelta lastre. Y luego, no tienes más que asignar un lugar a cada cosa que entre en tu casa y dejarla siempre ahí después de cada uso. Si cumples esas 2 sencillas reglas, tu hogar estará en orden. Y, si tiendes a la acumulación, oblígate a hacer revisiones y depuración de tu casa cada poco tiempo. Todo lo que no hayas usado en el último año, ya puedes dejarlo ir y darle la oportunidad a otra persona de disfrutarlo.

Crea rituales de organización diarios o semanales para mantener el orden en tu hogar o lugar de trabajo. Los rituales proporcionan estructura y estabilidad, creando un entorno propicio para el bienestar emocional. T

enemos suficientes razones par ayudarnos a nosotros mismos a mantener una estabilidad y un orden emocional y eso pasa, entre otras cosas por vivir en espacios ordenados y que nos proporcionen paz. Yo soy organizadora profesional, me dedico a ordenar casas y empresas, a organizar agendas y rutinas, ayudar a las personas a llevar una vida más organizada. Y creo que lo necesitamos más que nunca. Dedícale tiempo a tu orden mental, a tu orden físico, a tu casa. Verás el cambio que eso supone en tus emociones. Si quieres que te ayude o necesitas consultarme cualquier duda, escríbeme con total tranquilidad a mi correo [email protected] o llámame o escríbeme al teléfono 630 73 96 98.

El orden da paz. No dejes de probarlo.

TRANSCRIPCIÓN

EP 79 ORGANIZACIÓN EMOCIONAL

Hoy quería hablarte de una idea que me parece importantísima: la organización emocional. Es un concepto que va más allá del simple orden físico en el hogar o en el lugar de trabajo. Se trata de detectar el desorden interno y de tratar de encontrar el equilibrio emocional y reflejarlo en nuestro entorno externo.

¿Por qué nos desorganizamos emocionalmente?

Seguramente hay un número elevado de razones que pueden incidir en que nos desordenemos emocionalmente. Pero te voy a dejar las 4 en las que más coinciden los expertos como puntod e partida:

1 Experiencias pasadas no resueltas: Las experiencias traumáticas o difíciles del pasado pueden dejar una huella emocional que afecta nuestra capacidad para lidiar con las emociones en el presente. Los eventos dolorosos no procesados pueden provocar patrones de pensamiento negativos, miedo al enfrentamiento de situaciones similares y dificultad para regular nuestras emociones. La falta de resolución emocional puede llevar a una acumulación de estrés y ansiedad, contribuyendo así a la desorganización emocional en nuestra vida cotidiana.

2 Estrés crónico y sobrecarga de responsabilidades: El estrés crónico y la sobrecarga de responsabilidades pueden abrumarnos, haciéndonos sentir desbordados y desorganizados emocionalmente. Vivir en un estado constante de tensión y preocupación puede agotar nuestros recursos emocionales, dejándonos con poco margen para manejar nuestras emociones de manera efectiva. Como resultado, podemos sentirnos desorganizados emocionalmente, luchando por encontrar un equilibrio entre nuestras responsabilidades y nuestras necesidades emocionales.

3 Expectativas poco realistas: Las expectativas poco realistas sobre nosotros mismos y sobre los demás pueden generar frustración, decepción y estrés emocional. Cuando nos exigimos demasiado o esperamos demasiado de los demás, podemos sentirnos constantemente insatisfechos y desorganizados emocionalmente. La presión para cumplir con estándares irreales puede llevar a sentimientos de incompetencia, ansiedad y autoexigencia, contribuyendo así al desorden emocional en nuestras vidas.

4 Falta de autocuidado y atención plena: La falta de autocuidado y atención plena puede dejarnos vulnerables al desorden emocional. Cuando descuidamos nuestras necesidades físicas, emocionales y mentales, corremos el riesgo de agotamiento, burnout y desconexión con nosotros mismos. La falta de atención plena puede dificultar la gestión efectiva de nuestras emociones, ya que no estamos presentes para reconocer, aceptar y procesar nuestras experiencias internas.

¿Te reconoces en alguno de esos puntos? Pues ya tienes un punto de partida.

MÚSICA

¿Te gustaría aprender a no desorganizarte emocionalmente?

Pues lo primero, tienes que aprender a reconocer el desorden emocional porque esta vida va tan rápido que a veces no podemos parar ni siquiera para eso, para darnos cuenta de que algo nos está haciendo sentir incomodidad, tristeza, estrés, dolor o preocupación.

Para reconocer el desorden emocional, tienes que identificar las emociones que te causan malestar o desequilibrio.

Reflexiona sobre cómo estas emociones afectan tu vida diaria y tus relaciones. Decía Platón que «La mayor batalla es la que se libra dentro de uno mismo» y muchas veces estamos tan volcados hacia fuera, cegados por tantas luces de colores, comprando cosas, viajando, acumulando posesiones y experiencias, que nos olvidamos de nosotros mismos.

Lo segundo es la Aceptación y el Agradecimiento: acepta tus emociones sin juzgarlas como buenas o malas. Practica la gratitud por las lecciones que te enseñan tus emociones.

En tercer lugar, quiero recordarte algunas herramientas para la Gestión Emocional:

Mindfulness y Meditación:

Dedica tiempo diario a la meditación para calmar la mente y observar tus emociones sin identificarte con ellas.

Un estudio de la Universidad de Harvard muestra que la meditación regular reduce los niveles de estrés y ansiedad en un 65%.

También puedes llevar un Diario de Emociones. Un diario donde puedas expresar libremente tus pensamientos y lo que sientes. Escribir sobre tus emociones te ayuda a procesarlas y a ganar claridad sobre tus sentimientos.

Otra alternativa es la Terapia y el Apoyo Profesional:

Buscar ayuda de un terapeuta o consejero para explorar tus emociones en un entorno seguro y de apoyo.

Y, ahora que conocemos un poco más de dónde puede venir el desorden emocional que a veces sentimos todos, y cómo plantarle cara,  te cuento algunas Prácticas para incluir en tu rutina Diaria para Mantener el Equilibrio Emocional:

El ejercicio Regular es un gran aliado. No te voy a hablar de los numerosos estudios científicos que lo demuestran porque creo que, a estas alturas, todos estamos convencidos de ellos.

Dedica tiempo a actividades físicas que te ayuden a liberar tensiones y a mantener un equilibrio emocional.

El ejercicio regular ha demostrado reducir los síntomas de depresión y ansiedad en un 30% según la Asociación Americana de Psicología y ayuda a mejorar la situación y la evolución del paciente en muchas patologías y desde luego en una mayoría de enfermedades que tienen que ver con nuestra mente y nuestras emociones.

Otra rutina sanadora: Pasa tiempo de Calidad con tus Seres Queridos:

Cultiva relaciones significativas y dedica tiempo a compartir momentos con personas que te importan y con las que te sientes a gusto.

Las conexiones sociales fortalecen el sistema inmunológico y promueven un bienestar emocional duradero.

El Descanso y el Autocuidado también te protegen del desorden emocional porque hay veces que tu cuerpo y tu mente necesitan descansar, resetearse, asimilar todo lo que vivimos y sentir sensaciones placenteras y de bienestar para liberar las hormonas que nos permiten sentirnos bien.

Prioriza el descanso adecuado y practica el autocuidado diario, como tomar baños relajantes o leer un buen libro.»El cuidado personal es una inversión, no un gasto, tanto de dinero como de tiempo.

Y vamos a ver cómo Integrar la Organización Emocional en tu Entorno, en tus espacios.

El Orden Externo es un Reflejo del orden Interno:

Una vez que hayas trabajado en tu equilibrio emocional, refleja ese orden interno en tu entorno externo.

Mantén tu espacio ordenado y mantenlo libre de desorden para fomentar la calma y la claridad mental. Para eso, no me cansaré de decirlo, hace falta desprenderte de cosas, no vivir en espacios donde haya acumulación de ropa, de adornos, de libros y cuadernos, de recuerdos emocionales. Quédate solo con los más significativos y suelta lastre.

Y luego, no tienes más que asignar un lugar a cada cosa que entre en tu casa y dejarla siempre ahí después de cada uso. Si cumples esas 2 sencillas reglas, tu hogar estará en orden. Y si tiendes a la acumulación, oblígate a hacer revisiones y depuración de tu casa cada poco tiempo. Todo lo que no hayas usado en el último año, ya puedes dejarlo ir y darle la oportunidad a otra persona de disfrutarlo.

Crea rituales de organización diarios o semanales para mantener el orden en tu hogar o lugar de trabajo.

Los rituales proporcionan estructura y estabilidad, creando un entorno propicio para el bienestar emocional.

Un estudio de psiquiatría en EEUU investigó los efectos del trastorno de acumulación compulsiva (hoarding) en la salud mental y el bienestar emocional. Se encontró que el desorden físico causado por la acumulación compulsiva está asociado con altos niveles de estrés, ansiedad, depresión y disfunción social, lo que muestra que el desorden físico puede tener un impacto significativo en la salud mental.

Estos estudios proporcionan evidencia de la relación entre el desorden físico y el desorden emocional, destacando cómo el entorno físico desorganizado puede contribuir al estrés, la ansiedad y otros problemas de salud mental.

Tenemos suficientes razones par ayudarnos a nosotros mismos a mantener una estabilidad y un orden emocional y eso pasa, entre otras cosas por vivir en espacios ordenados y que nos proporcionen paz. Yo soy organizadora profesional, me dedico a ordenar casas y empresas, a organizar agendas y rutinas, ayudar a las personas a llevar una vida más organizada. Y creo que lo necesitamos más que nunca. Dedícale tiempo a tu orden mental, a tu orden físico, a tu casa. Verás el cambio que eso supone en tus emociones. Si quieres que te ayude o necesitas consultarme cualquier duda, escríbeme con total tranquilidad a mi correo [email protected] o llámame o escríbeme al teléfono 630 73 96 98. El orden da paz. No dejes de probarlo.